jueves, 14 de enero de 2016

Una página de mi vida!




En mis manos Dios colocó un gran tesoro,al que debía trasmitir  conocimientos y educar para la vida,y ese tesoro que fueron mis alumnos me enseñaron que mi labor para ser cumplida debería reflejarse en su rendimiento y en su actuación, no solo al terminar un año escolar sino en cada etapa 
de su vida.
Con mucho orgullo veo a mis alumnos desempeñándose en diferentes profesiones o realizando cualquier oficio digno, integrados a una sociedad que exige.
Entonces me remonto a esos años en los que uno terminó sus estudios y  cargado con una alforja de conocimientos,se enfrentó a la vida,cruzando caminos para llegar a ese lugar que nos asignaron pero sin la experiencia que solo se consigue en el diario trajinar.
Mis primeros pasos en esta ardua pero hermosa tarea de enseñar los realicé en una aldea de mi pueblo natal 
 y que lugar tan hermoso y acogedor,era muy joven pero allí encontré  personas que me trataron con respeto y cariño,gente amable y servicial,y alumnos ansiosos de aprender y siempre dispuestos a participar en las actividades de cada día y al poco tiempo me sentí como en casa,pero con la diferencia de que allí tenía que ejercer muchas funciones,la de médico porque se me comunicaba cuando alguien estaba enfermo haber si en mi Cruz Roja había algo que 
pudiera servir para calmar un dolor,la de consejero porque se me pedía la forma de solucionar problemas,oradora de orden al recibir al Sacerdote o alguna persona importante que llegara a la comunidad ,en fin muchas funciones,pero todo eso me hacía sentir feliz porque mi vocación era de servicio y esa forma de integrarme a la comunidad me dio mucha experiencia porque nuestro aprendizaje no termina al salir del colegio o de la Universidad nuestro aprendizaje debe ser continuo y ese que nos regala el día a día es el mejor.
De ese lugar lleno de hermosa vegetación de importantes cultivos de los que disfruté a manos llenas fui traslada 
al Grupo Escolar  de mi pueblo natal ya mis alforjas venían con conocimientos y con experiencias y me encontré una Sociedad de Padres y Representantes siempre dispuestos a colaborar, unos compañeros de trabajo que me brindaron su amistad y apoyo, me desempeñé primero como maestra de aula en diferentes grados allí encontré alumnos ávidos de saber, de los cuales aprendí mucho,y de los que guardo hermosos recuerdos.
Con los años pasé a la Dirección de ese Grupo y fue muy satisfactorio trabajar con los mismos maestros con los que un día compartí aulas porque todos comprendimos que teníamos una sola meta enseñar,conducir por buen camino que esa es  la obra del Maestro es nuestra misión y allí transcurrió la mayor parte de mi etapa en la educación.
Hoy doy gracias a Dios por haberme permitido ejercer una de las profesiones mas dignas .
Esta página va dedicada a mis alumnos que me han dado la mejor enseñanza y a mis colegas que comparten mis vivencias ..

Felicidades a todos mis colegas en nuestro día!!!
Nelly Guerrero